La paradoja del bolígrafo.

¡¡¡Aviso Spoiler!!!!

Hoy me he levantado con el umbral de ironía por las nubes, así que si os sentís sensibles, o muy políticamente correctos, no sigáis leyendo. Dejadlo para un día que tengáis mucha resaca y vuestra mayor preocupación sea no llegar a tiempo al baño.

En fin. Comencemos.

Corrían los finales de los años 60, cuando los Estados Unidos de (el único país que ha tirado dos bombas atómicas sobre población civil en la historia de la humanidad) América, debía liberar al mundo del yugo del comunismo. Era completamente intolerable que la Unión (voluntaria) Soviética estuviera encabezando la carrera espacial desde 1957 con el Sputnik 1.

Así que que los EEUU se pusieron manos a la obra, para jugar a “a ver quién la tiene más grande, con el dinero público”.

Así es cuando se dio el famoso discurso de JFK

Dicho discurso, en verdad, venía a decir:

Hemos contratado al señor Von Braun, que tiene una dilatada experiencia en construir bombas voladoras para los nazis, para que nos construya misiles balísticos para poder seguir siendo los buenos de la película (nuestra película) con fondos públicos, haciendo creer a toda esa panda de zampabollos, que sois los contribuyentes, que vamos a ir a la luna, para hacernos la foto más cara de la historia, y darle en los morros a los rojos.

Hagamos un pequeño inciso aquí. ¿Cómo que hacerse una foto en La Luna?

¿Estamos hablando de hacernos fotos en un pedrusco a 384,400 kilómetros, a temperaturas de entre 123º C y -238º C, con una radiación de aproximadamente 60 microsieverts por hora, y con una Hasselblad 500-EL manual?….

Ni sé a vosotros, pero siempre he pensado que hay cosas que no cuadran en este tema, como fotógrafo…

Algunas son:

La cámara Hasselblad 500 EL es una cámara de los años 1960s que tiene que ser manejado a mano. Entre la película y la lente se encuentra una plaquita de red con 25 cruces negros de orientación. Son 5 por 5 cruces en 5 hileras, y cada cruz tiene que ser visible en la foto (Wisnewski, p.154). [Así con esa cámara se produce “fotos cruzadas”].

La cámara Hasselblad 500 EL está instalado de manera fija en el pecho del traje de astronautas. Por eso no es posible para los astronautas tomar fotos de una manera controlada:

— los “astronautas” no pueden ver por el visor porque su casco no se deja voltear

— el espejo de la cámara es sacado así los “astronautas” no pueden ver la escena en el visor

— las cámaras están instalado en el pecho de una manera fija así la perspectiva para las fotos es absolutamente limitado

— las cámaras no tienen ningún sistema automático y todo tiene que ser arreglado a mano: la luz, el diafragma, la nitidez, pero los astronautas no pueden ver el fotómetro en el visor (Wisnewski, p.153).

El único elemento que hace el trabajo más fácil es un gran ángulo de una distancia focal de 60 mm, pero los otros factores son tan negativos que el gran ángulo no puede equilibrar los factores negativos (Wisnewski, p.165).

Otros elementos hay que indican que los fotógrafos no han trabajado con una cámara Hasselblad durante los “alunizajes” en la Tierra:

Protección del calor: Además falta cada protección del calor para las cámaras que tienen que sufrir al menos 100 grados y menos 100 grados Celsius. Pero las cámaras solo están pintado en plomo, nada más hay. Además falta para las cámaras una protección contra la radiación (Wisnewski, p.154).

Formación: Los “astronautas” no de todo tienen una formación fotográfica. No tienen ninguna idea como manejar una cámara con tiempo de exposición, diafragma y nitidez. Los “astronautas” no serían capaz tomar fotos perfectas en la Tierra tampoco con una cámara Hasselblad 500 EL (Wisnewski, p.153).

[Cómo debería haber sido eso “en la luna”? No posible].

3 cámaras: Para cada “alunizaje” – así indican las autoridades – fueron llevado tres cámaras Hasselblad 500 EL “en la luna”, para cada astronauta una, aunque rechazaron a cada gramo de carga superfluo (Wisnewski, p.154).

Peso: Con sus accesorios (un lente de 80 mm, una plancha A12, un protector del objetivo y pilas), una cámara Hasselblad 500 EL pesa 2 kg y 130 gramos.
(http://www.3106.net/photo/cam1025.htm)

Factor tiempo: En total una cámara Hasselblad 500 EL es absolutamente inadecuado para tomar fotos en estrés o en poco tiempo porque manejar una cámara Hasselblad 500 EL necesita mucho tiempo y consideración, pero un “camino en la luna” solo dura unas horas (Wisnewski, p.155).

Película de Kodak con 160 ASA.
Película de Kodak con 160 ASA.

Factor película: La película de diapositiva de Kodak tiene 160 ASA y no es adecuado para situaciones de luz no conocidos. 160 ASA no es tolerante respecto a faltas y es muy sensible con las condiciones extremas “en la luna”, así parece que con sol fuerte en la luna sin atmósfera hay un gran peligro de sobreexposición en las fotos (Wisnewski, p.155).

Radiactividad: La radiación radiactiva tiene efecto en las películas de Kodak con neblinas y contrastes flojos, pero jamás se ve esos efectos en las “fotos de la luna” (Wisnewski, p.157).

Así el equipo fotográfico parece más para un fotógrafo con experiencia de los años 1960s y 1970s en la Tierra que además tiene mucho tiempo, porque para arreglar la exposición la experiencia es decisivo. Pero los astronautas no de todo tienen esa experiencia necesaria fotográfica por años (Wisnewski, p.156).

Con una cámara Hasselblad 500 EL con la cual se tiene que arreglar todo a mano según la “experiencia”, un buen fotógrafo toma mayormente algunas fotos de una escena para eligir la foto mejor (Wisnewski, p.154). Eso es llamado “fotografía de región” (Wisnewski, p.156). Pero las películas presuntas de los “astronautas” jamás muestran variaciones, pero solo muestran fotos perfectas con una cuota de 0% de falta (Wisnewski, p.158).

Y eso es imposible.

Y eso no es una teoría conspirativa, tu estúpida Wikipedia, pero así son los hechos.

Fotos perfectos no son posible “en la luna”

Bajo de las condiciones

— cámara instalado en el pecho
— en traje de astronauta con lo cual no es posible ver en el visor
— sin espejo en el mecanismo (Wisnewski, p.157)
— con “astronautas de la luna” que no tienen experiencia tomar fotos (Wisnewski, p.153)
— con una radiación radiactiva que debería provocar efectos negativos en las películas de fotos (Wisnewski, p.157)

esas “fotos de la luna” perfectas parcialmente con escenas perfectas no son posibles (Wisnewski, p.157).

Si queréis, podéis reventaros la cabeza en la siguiente página. Si no, la podéis descargar en PDF. Os vais a echar unas risas, pero como fotógrafos, fijo que os entra un mosqueo del copón….

Vale. Llegados a este punto, asumimos que los EEUU se fueron a la Luna para hacerse una foto, y de camino, demostrarle al mundo quién la tenía más grande.

Y que Stanley Kubrick no tenía nada que ver…

Soltada esta parrafada, volvamos al tema que nos ocupa, y para el cual ha sido necesaria esta introducción:
En la época en que la NASA se estaba gastando una pastón en fabricar misiles, perdón, cohetes para llegar a la luna, tenían un serio problema para poder escribir en el espacio.

Si los bolígrafos (de entonces) precisaban de la gravedad para poder escribir, ¿Cómo escribir en el espacio, sin gravedad?

Pues la NASA tuvo que gastarse 1.000.000 de dólares para desarrollar un bolígrafo de nitrógeno presurizado, que podía escribir en cualquier entorno.

Mientras tanto, la URSS, para el mismo cometido, usó el lápiz.

¿Y cual es la moraleja de esto?

Pues que no necesitas un bolígrafo espectacular para escribir buenas palabras. Con un lápiz también puedes.

Es decir, no necesitas una cámara espectacular para hacer buenas fotos.

Ni siquiera en la Luna.

P.D.: La historia del bolígrafo de la NASA es más falsa que un beso de suegra.
Podéis leer un bonito artículo sobre este bulo aquí. Posiblemente como casi todo lo que aparece en esta entrada. Así que ya sabéis, podéis compraros una Hasselblad para haceros selfis para Instagram.

No saldréis mas guapos, pero sí que serás más pobre.

¡Saludos!

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2 pensamientos en “La paradoja del bolígrafo.

  1. Nada como los bolis BIC (los de punta normal, no fina), aunque los de cuatro colores molaban mazo (como cantaria Camilo Sesto). Todo el mundo sabe que los USA son buenos y los sovieticos olian a azufre y tenian rabo y cuernos. Son verdades o axiomas que no se pueden refutar como el que los niños vienen de Paris y el qye diga que vienen de Londres o Guatemala es un “hereje”.

    1. Si. La verdad es que el BIC naranja siempre me pareció un producto snob y pretencioso. Además no podías saber cuanta tinta te quedaba. ¿Producto del capitalismo, y te obligaba a gastar sin control?¿Resultado del comunismo, siempre opaco a lo que ocurre dentro?. A mí siempre me ha gustado la pluma estilográfica. Convierte la escritura en un placer. Por cierto, los niños ya no viene de Paris. Ahora los pides por Amazon.

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